
La primera marcha en repudio a los recortes en el voto de la ciudadanía residente en el exterior partió, al son de gaitas y panderetas, del monumento de los españoles hasta la Cancillería.
La marcha estaba convocada por el Consejo de Residentes Españoles (CRE) de Buenos Aires, la Federación de Sociedades Españolas, la Federación de Asociaciones Gallegas y la Federación Unión de Asociaciones Gallegas.
Simultáneamente, se realizaron manifestaciones en Brasil, Paraguay, Suiza y Chile, en algunos casos convocadas por los CRE, en otros, por federaciones locales.